lunes, 27 de febrero de 2012

Y de nuevo León




Como casi todos los años, El Club de Pesca Orbigo organizo un nuevo curso de lance y pesca que tuve el placer de impartir. Una docena, entre nuevos y viejos pescadores aclararon sus dudas y llevaron la mosca un poquito más lejos y sin tantas dificultades como antes.
Muchas fueron las anécdotas del curso, pero quiero destacar una que por curiosa me llamó fuertemente la atención. Algún pescador se dio cuenta durante la clase teórica que todas las líneas vienen acompañadas por un dibujo del perfil de la línea y que jamás se había percatado de ello. Otra cosa será que la próxima vez sepa interpretar los conceptos de barriga, ahusamiento trasero y delantero y punta. “Ya me dirás algo”

En lo que se refiere al lance, quedo muy claro que un equipo de pesca para aprender debe llevar una sobrealinación, es decir, debemos procurar aprender con una línea WF y de un peso superior al recomendado en la caña. Es mucho más fácil de aprender, simplemente el peso marca más claros los tiempos, hay un mejor deslizamiento (siempre que la línea esté en condiciones) y el pescador siente más el lance.
Pero cada año añado algo nuevo en este curso y esta fue el lance con cabezas lanzadoras. Las he usado siempre para enseñar a realizar la doble tracción de una forma rápida, pero esta vez fue para mostrarles como llegar lejos sin esfuerzo y sin pérdida de tiempo, un falso lance es suficiente para alcanzar distancias jamás soñadas. Y la verdad es que fue divertido y que la distancia engancha a todo el mundo.
El domingo, ya en el río y disfrutando de un gran día de sol, nos enredamos con las presentaciones. Gustaron los curvos y hasta alguien prometió “barrer del mapa “ a sus compañeros de pesca con aquellos lances, que por decirlo de alguna forma le parecían milagros que salían de su caña y que dos días antes no conocía.
Y yo me alegro de todo ello.